Nunca pensé que él fuera el dueño de mi tristeza, porque era tan bello, pero destruyó toda mi existencia. Eran las diez de la noche y no podía dormir, tomé las llaves del coche, y dije voy a salir. Llegué a una discoteca de fama popular. Apenas entré en el área me empezaron a jockear, el dj de la cabina puso mi música a sonar, pero yo nunca imaginé con qué me iba a encontrar. Era mi novio y estaba con ella, era mi novio que me era infiel. Era mi novio y estaba con ella, a que hombre tan cruel. Él en la pista entró, abrazó su espalda y la besó. Que ironía de la vida, que ironía, que ironía ser artista. Que ironía en este mundo cuando te engañan, sientes un dolor profundo. La agarró, la besó, y en la pista quedé yo, observando lentamente toda su confinación, pues tanto yo lo quise, tanto que lo adoré yo, para que él me pague con esta traición.